jueves, septiembre 02, 2004

Rayos y centellas

Hace muchos años que no me tocaba una tormenta como la de anoche. Los truenos eran tan fuertes, que hubiera jurado que caían en el pararayos del edificio de la policía que está justo enfrente de casa. El sonido del agua chocando contra el pavimento era fuerte y por momentos pasaba de ser relajante a aterrador.
Pero de verdad, ¡que bueno es ver llover y no mojarse!, como dice el dicho. Yo pensaba en Juanita, la gata. Con lo que odia el agua, seguramente estaba más asustada que yo y refugiada en el último rincón del cuarto de lavar, esperando a que pasara el fenómeno meteorológico.
Amaneció nublado y húmedo, pero aún no hace frío. A veces, parece que los días nostálgicos hacen falta. Que sentarse a ver caer el agua por la ventana se agradece, cuando no es a menudo y no tenemos que salir a trabajar tomando el transporte público.
Aunque no me gusta el invierno, ni el frío, ni la obscuridad, debo reconocer que hoy ha sido un día lindo. Es más, no he traído el paraguas y confío en que de vuelta a casa, sirva de pretexto para tener que caminar bajo la lluvia... hace tiempo que no lo hago.

4 Comments:

At 11:11 p.m., Blogger Jorge Pedro said...

Dicen que el agua de lluvia es muy buena para el pelo, ¿será? Saludos.

 
At 2:13 a.m., Blogger Luis Ricardo said...

pronto tendrán que consultar el climatológico todos los días, como los ingleses.

 
At 3:59 a.m., Blogger Zadowsky said...

Hubiera sido mejor que un rayo le cayera a uno de los policías. Por lo menos aquí en México tienen mala fama, tu sabes, corruptos, tontos, etc. A mi en lo personal me gustan mucho esos días de lluvia, son algo nostálgicos. Tu prefieres caminar bajo la lluvia, a mi me gusta mas estar acostado viendo por la ventana y escuchando el Ok Computer de Radiohead.
Saludos.

 
At 6:18 p.m., Blogger Jorge Pedro said...

¿Dónde andas? Pon algo nuevooo. Te mandé un correo, por cierto.

 

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